Higiene personal
Los pacientes con Enfermedad de Alzheimer sufren pérdida progresiva de sus capacidades cognitivas como memoria, orientación, comprensión del lenguaje y de su entorno… Esto conlleva una disminución de su capacidad funcional, inicialmente para actividades complejas (gestión de bancos, facturas, etc.) y posteriormente también para la realización de las tareas más básicas (alimentación, aseo, etc.)
El cuidador ejerce un papel fundamental para conseguir el bienestar del paciente, lo cual influye positivamente en grado de autonomía del mismo.
Es muy importante:
- Evitar modificaciones frecuentes del ambiente y entorno habitual del paciente.
- Establecer rutinas: realizar las actividades de la vida diaria en forma ordenada estableciendo horarios y espacios. Es importante tanto para el paciente como para el cuidador. Mejora la autonomía y autoestima del paciente y disminuye la sobrecarga del cuidador.
¿Por qué se deteriora su higiene?
Los pacientes con Enfermedad de Alzheimer, a lo largo del curso evolutivo de su enfermedad, llegan a presentar olvidos sobre su higiene personal. Pueden considerarlo innecesario o incluso haberse olvidado de cómo hacerlo y esto puede provocar un conflicto puesto que el paciente no es capaz de comprender esa necesidad. Por ello es muy importante que el cuidador entienda esta situación para poder manejarlo adecuadamente.
Recomendaciones en el manejo
- Respetar en la medida de lo posible su intimidad y su autonomía personal.
- Los refuerzos positivos en cuanto a su buen olor, aspecto después de la higiene y vestido puede facilitar la aceptación de estas actividades.
En el momento del baño
- Hay que ofrecer un ambiente tranquilo y sin prisas, explicarle en cada momento lo que vamos a hacer paso a paso.
- Simplificar la tarea lo más posible.
- Hacerlo siempre a la misma hora estableciendo una rutina.
- Si puede hacerlo solo/a: que lo haga siempre respetando su intimidad y siempre supervisando.
- Mejor ducha que baño para evitar caídas.
- Vigilar en todo momento la temperatura del agua para que esté templada, los pacientes pueden presentar perdida de sensibilidad y se pueden quemar.
- Se aprovecha el momento del baño para inspeccionar las uñas y la piel.
Si se niega al baño
- Podemos intentarlo más tarde, o hacerlo por partes para no desnudarlo entero o hacerlo con toallitas húmedas.
- Si continúa la negativa: NO INSISTIR, lo dejaremos para el día siguiente.
- Si siempre crea conflicto esta tarea buscaremos a otro familiar o cuidador para que lo haga.
Cuidados después del aseo
- Del cabello: mejor corto y fácil de cuidar. No usar secador se pueden asustar con el ruido y quemar con el aire.
- De la boca: ayudarle a realizar su higiene bucal.
- El afeitado: usar siempre maquinilla eléctrica para evitar cortes en la cara.
- El maquillaje, respetarlo siempre si tenía costumbre de hacerlo pero dejando al uso solo las pinturas necesarias, si tiene muchas se puede poner todas.
En el momento de vestirse
- Que tenga solo ropa de temporada en los armarios, pocas prendas y combinables, pueden ponerse la ropa de verano en invierno y viceversa.
- Ropa cómoda y fácil de poner, con botones grandes y en fases más avanzadas usar velcros o elásticos.
- Zapatos mejor cerrados, sin cordones con suela rugosa o antideslizante y sin tacón así evitamos caídas.
- Dejarle que elija siempre que pueda la ropa que se quiere poner.
- Si puede vestirse solo que lo haga pero siempre supervisando, vamos a procurar que tenga independencia a vestirse el mayor tiempo posible.
- Podemos ayudarle presentando la ropa que se va a poner en el orden que la debe de poner
MATERIALES
- Cuadernillos con Ejercicios de estimulación cognitiva de diferentes grados
- Juego del Memory
- Cómic: Tú, yo y el Alzheimer
- Consejos para pacientes y cuidadores
¡Y muchos más!