Los niños nunca dejan de sorprendernos. Su capacidad de aprendizaje es únicamente comparable a su capacidad para asimilar con naturalidad nuevas situaciones.

Partiendo de esta base, no parece haber motivos para ocultarles ciertas realidades o privarles de conocer aspectos de la vida que a los adultos nos pueden parecer desagradables. En este post, te vamos a dar algunos consejos para que sepas como transmitir a los más pequeños, la noticia del diagnóstico del Alzheimer a un familiar cercano.

Es frecuente, especialmente cuando les falta información, que los niños no comprendan la falta de memoria de alguno de sus abuelos. A menudo lo relacionan simplemente con la edad, y tienden a pensar que es normal que cuando las personas se hacen mayores, olvidan y se despistan. Es importante sentarse con ellos y explicarles que esta falta de memoria y de capacidad para realizar ciertas tareas de manera independiente, es debido a una enfermedad. El mensaje que debemos transmitirles es: El abuelo o abuela está enfermo, pero con el apoyo de toda la familia y seres queridos, le ayudaremos.

Actualmente, en España unas 800.000 personas padecen Alzheimer, y debido al envejecimiento de la población, este número podría verse duplicado en 2050. El gran impacto social de la enfermedad de Alzheimer, suele afectar a todo el núcleo familiar, e implica también, evidentemente, a los más pequeños. Según un estudio realizado en 2011, es frecuente que los niños sientan vergüenza frente a sus amigos con respecto a la enfermedad de su abuelo o abuela. Otro dato que revela el estudio, es que más de un 85% de los niños manifiestan haber notado cambios en la dedicación de sus padres hacia ellos, a raíz del diagnóstico del Alzheimer, aunque la gran mayoría de ellos lo entienden.

Para evitar la vergüenza, la falta de comprensión, e incluso el miedo que puede afectar a los niños con respecto a la enfermedad de algún miembro cercano de su familia, es muy importante comunicarles de manera efectiva, la nueva situación familiar. De esta forma ellos se sentirán partícipes del cuidado de la persona con Alzheimer, y adquirirán cierta responsabilidad, que les ayudará a comprender, colaborar, y en algunos casos, a madurar.

Un cómic para entender el Alzheimer

El equipo de Kern Pharma, juntamente con Fundación ACE, editaron y publicaron en 2016 el cómic “Tú, yo y el Alzheimer”. El cómic va dirigido a niños y niñas entre los 6 y los 12 años de edad, este material quiere ayudar a los menores a afrontar con mayor conocimiento el diagnóstico de la enfermedad en personas cercanas a ellos como, por ejemplo, sus abuelos.

Consejos para explicar el Alzheimer a los niños

• Hay que explicar el concepto de la enfermedad. Puedes usar metáforas u otros recursos para hacerlo, dependiendo de la edad y comprensión del niño, pero haciendo hincapié en que se trata de un problema en el funcionamiento del cerebro.
• A menudo la persona enferma ha cuidado de los niños y es muy querida. No debemos dar falsas esperanzas de curación. La persona con Alzheimer necesitará, cada vez más, recibir los cuidados y el cariño que, poco tiempo atrás, esta persona brindaba a los niños. Transmitir esta idea a los pequeños les ayudará a comprender el alcance de la situación.
• El abuelo o abuela sigue queriendo igual que siempre a su nieto o nieta. Esta idea hay que repetirla a los pequeños recurrentemente, ya que la actitud de la persona con Alzheimer puede, en ocasiones, hacer pensar en lo contrario. El abuelo o abuela es la misma persona, y su amor por los niños es el mismo, aunque tiene una enfermedad que le dificulta transmitirlo como antes.
• Para que los pequeños comprendan e identifiquen los comportamientos extraños del abuelo o abuela, enumera los síntomas y coméntalos uno a uno. Trata de explicar que poco a poco, estos se harán más evidentes y recurrentes.
• Pregunta a menudo a los niños o niñas de la familia como se sienten. Ofréceles tu apoyo y comprensión en sus sentimientos de tristeza o afectación por la nueva noticia. Y sobre todo, hazles saber que es normal que se sientan así en esta situación.
• Los pequeños han de tener contacto con la persona enferma, pero no hay que obligarles ni forzarles a ocuparles de las tareas de cuidado. Lo ideal es que los momentos que compartan la persona con Alzheimer y los niños, sean momentos felices. Por ejemplo, podemos hacerles compartir los paseos diarios, y evitar tareas que pueden resultar tediosas como las relacionadas con la higiene, aunque lo mejor es que sean los propios niños, los que valoren que momentos quieren compartir con su abuelo o abuela.