El Alzheimer es una enfermedad neurodegenerativa que con el paso del tiempo empeora. Las personas con Alzheimer, dependiendo de la fase en la que se encuentren, pueden necesitar ayuda para realizar tareas simples y cotidianas como el aseo, vestirse, o desplazarse. Por este motivo, lo habitual es que según avanza la enfermedad, el papel de la persona cuidadora vaya teniendo más responsabilidad y peso en el día a día del paciente.

El cuidado de una persona con Alzheimer, independientemente de que se realice de forma profesional o por parte de un miembro de la familia o una persona cercana, es un trabajo que puede ser duro tanto física como psicológicamente, llevando a situaciones de estrés difíciles de manejar.

En Konexion Alzheimer damos mucha importancia a la tarea de la persona cuidadora, porque somos conscientes de lo vital que es en todos los aspectos. Sin embargo, es igualmente importante que su salud física y emocional, también sean tenidas en cuenta.

Estrategias para gestionar el estrés

Ante todo, conviene destacar que las recomendaciones que haremos a continuación son bastante generales, y que cada persona cuidadora es diferente y experimenta sentimientos y situaciones que no tienen por qué ser iguales a las de otras.

Busca ayuda y apoyo

No tiene nada de malo necesitar ayuda, y mucho menos aceptarla y apoyarse en otras personas. Si sientes que necesitas ayuda profesional, búscala y consulta con un profesional médico. Si es necesario que te echen una mano de vez en cuando con algunas tareas con las que no puedas lidiar o no puedas gestionar directamente, deja que te ayuden.

Es imposible llegar a todo, especialmente si estamos cuidando a una persona dependiente en un grado bastante alto que pueda suponer incluso la convivencia y todo lo que ello conlleva. No debemos sentirnos mal o culpables por compartir algunas cargas que tengamos.

Haz aquello que te haga feliz

Hay vida más allá del trabajo o de los cuidador diarios de un familiar. Somos conscientes de que no siempre es posible o fácil sacar un rato para nosotros mismos en estas situaciones, pero es necesario que también nos cuidamos para poder cuidar a los demás.

Hacer deporte, ir al cine, quedar con amigos para ir a tomar algo… lo que sea que te haga feliz, te distraiga, y consiga que te evadas por un rato de tus obligaciones y preocupaciones, es una herramienta estupenda para combatir el estrés y liberar tensiones.

El tiempo libre es un bien muy preciado, especialmente cuando disponemos de él en pequeñas cantidades, así que dedícate un tiempo siempre que puedas.

Planifica y establece objetivos realistas

Intentar abarcar demasiado, o marcarse objetivos imposibles, también supone una fuente de estrés y frustración que podemos evitar. Tenemos el tiempo que tenemos, y podemos llegar hasta cierto punto, por lo que intentar hacer más de lo que podemos puede llevar a dos cosas: la primera, es a no conseguir lo que nos hemos propuesto; y la segunda, es a llevarnos una decepción mientras intentamos llegar a un objetivo inalcanzable.

Sé realista, da pasos pequeños aunque tardes más tiempo del previsto si no es un asunto urgente. Prioriza lo más importante, y distribuye bien las tareas para optimizar el tiempo que puedes dedicar a cada una de ellas.

Amplía tus conocimientos

La información es poder, y cuanto mejor informados estemos para hacer frente a diferentes situaciones, mejor preparados estaremos para hacerles frente. Incluso también es conveniente estar informados para poder prevenir ciertas situaciones de riesgo, o que puedan derivar en un problema que nos estrese o nos cree un contratiempo.

Internet está repleta de información útil, como la que ofrecemos en Konexion Alzheimer y en muchos otros portales especializados en la enfermedad de Alzheimer, y también podrás acceder a ella de forma presencial en asociaciones, centros de salud, y otras entidades que colaboren o trabajen con pacientes de Alzheimer o familiares.

Mantén hábitos de vida saludables

Una buena alimentación, y hacer algo de ejercicio físico, puede ser de gran utilidad para sentirnos mejor. La alimentación y la actividad física son pilares fundamentales para tener una buena salud, y también son herramientas para mejorar nuestro estado de ánimo, o reducir el estrés, especialmente el deporte.

En función de la situación en la que nos encontremos, también es importante conocer nuestros derechos si hemos de dedicarnos al cuidado de un familiar. En Konexion Alzheimer ponemos a tu disposición información importante sobre conciliación y ayudas para este tipo de situaciones. En las diferentes asociaciones de pacientes y familiares también podrán informarte sobre grupos de apoyo, ayudas, y otros aspectos que podrán serte de utilidad.